El término Neumática proviene de la palabra griega “Pneuma”, que significa “aliento” o “soplo”. En su concepto original la Neumática se ocupaba de la dinámica del aire y de los fenómenos gaseosos.
En nuestros días, podemos definir la neumática como “Tecnología que emplea el aire comprimido como modo de transmisión de la energía necesaria para mover y hacer funcionar mecanismos”. El aire es un elemento elástico y por tanto, al aplicarle una fuerza, se comprime, mantiene esta compresión y devolverá la energía acumulada cuando se le permita expandirse.
Antes de llegar a los elementos de trabajo, el aire se somete a las siguientes operaciones; Producción, Tratamiento y Distribución.
Producción
El aire antes de ser introducido en una instalación neumática, debe ser comprimido. Esta operación es realizada por los compresores, que son máquinas que toman aire de la atmósfera y disminuyen su volumen.
Tratamiento
El aire absorbido por el compresor contiene impurezas sólidas y líquidas. Estas partículas, al chocar contra las paredes de las tuberías y accesorios, ocasionan erosiones y atascos, que se traducen en importantes pérdidas de rendimiento y materiales. Por tanto se hace necesario eliminar estas impurezas, operación que se realiza mediante el filtrado.
Distribución
Una vez que el aire se ha tratado convenientemente, es preciso proceder a su distribución. El diseño de la distribución desde el compresor hasta el consumidor debe cuidarse especialmente, ya que si existen incorrecciones se traducirán en pérdidas de potencia importantes.
En nuestros días, podemos definir la neumática como “Tecnología que emplea el aire comprimido como modo de transmisión de la energía necesaria para mover y hacer funcionar mecanismos”. El aire es un elemento elástico y por tanto, al aplicarle una fuerza, se comprime, mantiene esta compresión y devolverá la energía acumulada cuando se le permita expandirse.
Antes de llegar a los elementos de trabajo, el aire se somete a las siguientes operaciones; Producción, Tratamiento y Distribución.
Producción
El aire antes de ser introducido en una instalación neumática, debe ser comprimido. Esta operación es realizada por los compresores, que son máquinas que toman aire de la atmósfera y disminuyen su volumen.
Tratamiento
El aire absorbido por el compresor contiene impurezas sólidas y líquidas. Estas partículas, al chocar contra las paredes de las tuberías y accesorios, ocasionan erosiones y atascos, que se traducen en importantes pérdidas de rendimiento y materiales. Por tanto se hace necesario eliminar estas impurezas, operación que se realiza mediante el filtrado.
Distribución
Una vez que el aire se ha tratado convenientemente, es preciso proceder a su distribución. El diseño de la distribución desde el compresor hasta el consumidor debe cuidarse especialmente, ya que si existen incorrecciones se traducirán en pérdidas de potencia importantes.
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